Un Muelle
La Playa de orillas rocosas que toma el mismo nombre del muelle se encuentra a un paso del Puerto con un cómodo acceso desde la rambla, enmarcada por palmeras y terrazas de madera que balconean al mar.
Pero no siempre estuvo allí, hace muchos años la rambla no era la misma ni había terrazas de madera, frente a la casa de la familia Mailhos estaba la playa y bajo el agua de manera moderada fluctuaba un banco de arena entre las rocas a unos cuantos metros de la orilla.
La familia Mailhos y sus amistades acostumbraban a disfrutar de baños de mar, para llegar al banco de arena debían acceder al agua calzados para evitar lastimarse con las piedras sumergidas y una vez allí ataban su calzado en una vara que clavaban en el banco de arena.
Dada esta situación el Sr. Mailhos decidió construir el muelle para evitar el acceso por la parte rocosa y fue así que luego de su construcción cada verano colocaba una escalera de metal que pintaba todos los años.
Varias generaciones de locales y veraneantes aprendieron a nadar en las aguas de la playa de Mailhos.
Hoy el muelle sigue ahí ya con más arena que tapa las rocas bajo el agua, un pequeño muelle con historia que espera lo visiten.
Fuente : Historia Teresa Perez Bourse